Las recientes denuncias de persecución sindical y despido a una madre cabeza de hogar en la Sociedad Puerto industrial Aguadulce (SPIA), ha movilizado a sus compañeros de trabajo. Según Pedro Alejandro Rivas, presidente de SNTT Subdirectiva Buenaventura, la situación en la empresa Aguadulce ha llegado a un punto crítico, con trabajadores sindicalizados enfrentándose a despidos y represalias desproporcionadas.

 

En un incidente reciente, una trabajadora sindicalizada fue despedida tras un daño menor a un equipo de protección. Sin embargo, otro empleado, responsable de daños materiales significativos, continúa empleado en la empresa, lo que resalta una clara desproporción en el trato hacia los trabajadores sindicalizados.

 

“Desde el momento en que fui despedida de la empresa, el sindicato ha sido un pilar fundamental de apoyo. Siempre han estado a mi lado, brindándome asistencia en todo momento. Esta situación me ha hecho reflexionar sobre la injusticia de mi despido, ya que mis acciones no ameritaban una medida tan drástica. A pesar de ello, sigo adelante con la cabeza en alto, buscando la manera de mantener a mi familia”, expresó Sandra Patricia Murillo Bermúdez, Operadora de equipo en la Sociedad Puerto Industrial Aguadulce (SPIA).

 

 

Dijo que su rol como madre cabeza de hogar es complicado. “Tengo tres hijos que dependen de mí, y la falta de empleo ha afectado sus vidas profundamente. Mi hija mayor tuvo que abandonar sus estudios para ayudar con los gastos en casa, mientras que mi hijo menor sigue en la escuela”.

 

A pesar de la complicado de estar sin trabajo, Murillo Bermúdez aprovechó la oportunidad para instar a todos sus compañeros a realizar su trabajo con la mayor dedicación posible y a reportar cualquier irregularidad que encuentren.

 

“Nadie debería enfrentar un despido injusto por errores menores. Es esencial hacer las cosas bien y estar siempre unidos, apoyándose mutuamente en momentos difíciles”, destacó.

 

Además de los despidos, los trabajadores sindicalizados han reportado incumplimientos en áreas de salud laboral, como la falta de pausas activas obligatorias. Esta omisión, junto con otras quejas, evidencia un patrón de comportamiento empresarial que ignora los derechos de los trabajadores afiliados a SNTT.

 

Jorge Arturo Rivera, reconocido abogado que ha ganado importantes casos en el pasado, ha tomado el caso de la trabajadora despedida, y se ha conocido además, que se deben respetar sus derechos como madre cabeza de hogar y miembro de la comunidad de Bajo Calima.

 

 

Pedro Alejandro Rivas destaca la necesidad de que el Puerto Aguadulce reconsidere su decisión y reintegre a la empleada, advirtiendo sobre el desgaste que esta situación puede causar a la propia empresa.

 

El Presidente de SNTT Subdirectiva Buenaventura, dijo que ha observado un patrón de despidos de trabajadores sindicalizados en los últimos cinco años, lo que agrava la sensación de persecución. Vladimir Vivas, otro trabajador despedido recientemente, es solo uno de muchos que han sido afectados por estas prácticas. Mientras tanto, aquellos no afiliados al sindicato que han cometido faltas similares han recibido sanciones menos severas según el Reglamento Interno de Trabajo.

 

La comunidad afiliada a SNTT Subdirectiva Buenaventura espera una respuesta justa de la empresa y un cambio en sus prácticas de manejo de personal. Mientras tanto, las denuncias continuarán hasta que se garantice un ambiente laboral equitativo para todos los empleados, independientemente de su afiliación sindical.