Oct 05, 2024

Seis años de incumplimiento del Estado con los damnificados de Bendiciones

  • Apr 12, 2012
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Foto EFE

 

Por esta fecha 12 de Abril del año 2006, miércoles Santo, ocurrió la avalancha de Bendiciones, que causo muchos muertos y dejó familias damnificadas. Fue entonces un hecho doloroso, que movilizó la solidaridad de muchas personas bonaverenses y entidades civiles y públicas del Estado.

 

A seis años, de esta tragedia el balance no es muy positivo que digamos. La Diócesis de Buenaventura a través del Padre Jhon Reina Ramírez, ha hecho un constante acompañamiento y ha estado pendiente del pago de los arriendos a las familias damnificadas y de colaborarles en asuntos de salud.  La casa de encuentros  y la Curia Diocesana temporalmente acogieron los primeros meses a las familias damnificadas. Las religiosas y religiosos compartieron esos momentos de dolor.

 

A seis años de distancia no se les ha cumplido a las familias  damnificadas. La Diócesis de Buenaventura ha sido solidaria de esta situación y ha tocado puertas para buscar una solución definitiva, pero no ha encontrado apoyo efectivo sino indolencia, desinterés y falta de voluntad política de los respectivos organismos del Estado.

 

Lo que falta por hacer:

 

El Gobierno Nacional debe aportar el dinero para la construcción de las viviendas familiares, del colegio y el arriendo que se les debe desde hace un año.

 

El Gobierno Departamental tiene pendiente lo de saneamiento básico, alcantarillado y servicios públicos.

 

La Alcaldía Distrital de Buenaventura, aunque está al día, es la que debe gestionar los recursos ante los respectivos entes del Estado, con empeño y decisión, para poder cumplir así a las familias damnificadas que en su dolor por la perdida de sus seres queridos y pertenencias, sienten como estos entes no han tenido la capacidad suficiente, de solucionar un problema social que ocurrió hace seis años. La llamada “Prosperidad Democrática”  es también para Buenaventura.

 

Como Obispo de Buenaventura soy solidario de este problema social con la población vulnerada en sus derechos fundamentales. Hoy denuncio la indolencia del Estado en todo su nivel y urjo a que no se dilate más este calvario que sufren personas humildes, ya es hora de actuar y no de prometer. Acompaño de corazón a los damnificados de la vereda de Bendiciones en su justo reclamo al gobierno.

 

Urge ya una solución integral y una respuesta positiva a la comunidad de Bendiciones.

 

 

 

 

Héctor Epalza Quintero

Obispo de Buenaventura