El reloj del “Santuario del Señor de la Misericordia” en el barrio El Pondaje, oriente de Cali, marcaba las 11:35 de la mañana del 1 de enero cuando la médica Dilian Francisca Toro, levantó su mano para jurar como Gobernadora del Valle del Cauca para el periodo 2016-2019, ante la notaria Quinta del Círculo de Cali, Gloria Marina Restrepo Campo.

 

Vestida de blanco ingresó antes de las 10:00 de la mañana en medio de aplausos y saludos a ese recinto escogido por ella para toda la ceremonia de protocolo que inició con la eucaristía celebrada por el Arzobispo de Cali, Monseñor Darío de Jesús Monsalve, quien la bendijo en el propósito del evangelio de vencer la indiferencia y alcanzar la paz.

 

Participó de la eucaristía desde la primera fila acompañada de sus familiares y del que será su equipo de gobierno y recibió con un gesto de agradecimiento al terminar la misma, los deseos de mejores éxitos en su gobierno de parte de voceros de la comunidad Judía, de las iglesias cristianas evangélicas y de la iglesia católica.

 

Con un recinto desbordado en asistencia, hizo su aparición el Salsero internacional, Willy García, quien interpretó en medio aplausos y acompañado por la Banda Sinfónica Departamental, la canción “Yo tengo fe”, que es una plegaria por paz, en coincidencia con el respaldo de la Gobernadora al proceso de paz y al tema del postconflicto.

 

Luego de ese momento musical, la Médica Dilian Francisca subió al escenario principal para ser ungida como gobernadora, portando la distinción especial de mando “Collar de Gran Maestre”, acompañada de su esposo, Julio César Caicedo, su hijo Julio Cesar, su hermana Ximena Toro y de autoridades civiles, policiales y militares.

 

La toma e juramento duro pocos minutos, pero significa para ella en su carrera política el mayor logro en su vida pública. Luego como Gobernadora firmó el acta de posesión y le fue impuesta la banda Departamental con la bandera del Valle del cauca.

 

Cuando la presentadora de la ceremonia, Margarita Ortega, dijo: “les presento a la nueva Gobernadora del Valle del Cauca”, los centenares de asistentes aplaudieron durante varios minutos, que se acallaron cuando la nueva mandataria se ubicó en el atrio desde donde pronunció con gran sentimiento su discurso que tuvo momentos de gran emoción, en los cuales se vio a una mujer muy sensible, que finalizó diciendo:

 

“invocando a Dios, para que nos ilumine y bendiga todas nuestras acciones. Confío, al final de mi gobierno, en haber estado a la altura del enorme reto que para mí supone ser la primera mujer que alcanza la máxima responsabilidad política e institucional del Valle del Cauca. Tengan la certeza que trabajaré las próximas 208 semanas y 1.460 días con energías renovadas y siempre motivada por el amor que siento por mi región, para dejar proyectado al departamento al 2050, recuperar el liderazgo y así asegurar el bienestar de la población del Valle del río Cauca”.