Quejas reiteradas de la comunidad se produjeron el sábado en la tarde a raíz de la nutrida caravana que por varias horas se desplazó por la avenida Simón Bolívar y en las calles internas de los barrio de la ciudad - puerto.

 

Consideran los quejosos que no hay derecho que los motociclistas sometan a la ciudadanía a este tipo de actividades, que generan desorden y caos en una ciudad que tienen sólo una vía principal y que en varios tramos está siendo intervenida, lo que genera mayor presión al desplazamiento de los vehículos de servicio público, particulares y de carga pesada.

 

Consideran que es inaudito que las autoridades llámese Policía o Secretaría de Tránsito permitan que los conductores de este tipo de vehículos hagan lo que mejor les parezca en la ciudad y no se haga nada para detenerlos o por lo menos para controlar el desorden.

 

Manifestaron además, que la gente del común no tiene por qué sufrir las consecuencias de los que generan desorden como lanzar maicena o licor a los transeúntes, despojar de sus pertenencias a quienes están esperando el transporte que los lleve a su destino, rayar o golpear vehículos y en los casos más graves atropellar personas.