En tercer debate en la Asamblea Departamental fue aprobado el proyecto de ordenanza para la protección y salvaguarda del viche como bebida ancestral y artesanal en línea de trabajo como la producción y la comercialización.
“Estamos muy contentos porque este fue un proceso que estamos desarrollando desde la gobernación del Valle del Cauca con el colectivo destila patrimonio y acompañado de otros sectores fundacionales”, manifestó Consuelo Bravo Pérez, secretaria de Cultura (e) del Valle.
Con esta ordenanza se busca reconocer al viche como un patrimonio de interés especial para el departamento únicamente en Buenaventura y en sus cuencas, que es donde se produce y se encuentran los sacadores del viche que se hace a partir de la caña nativa que se cultiva en los diferentes territorios.
Hay que recordar que desde la Gobernación del Valle se han realizado varias acciones, entre ellas la creación de la Mesa Departamental del viche, el acompañamiento técnico, para que los sacadores de viche tengan como punto de referencias otras experiencias que se dan en el resto del continente.
“Hicimos el encuentro internacional de bebidas artesanales donde participaron Perú, México y Ecuador; tuvimos un experto de la comisión reguladora del mezcal de México quien estuvo trabajando con el colectivo y los sacadores de viche y, adicionalmente, hicimos el Viche Concierto como un proceso de visibilización”, anotó Bravo Pérez.
De igual manera el viche ya fue aceptado en la lista representativa de patrimonio inmaterial.
Todas estas acciones están encaminadas a que el viche sea entendido como patrimonio, como saber ancestral y como referente de reivindicación de la práctica al interior de los territorios del pacífico vallecaucano con vocación vichera.
Normalizar, desde lo local, la comercialización del viche, formalizar la venta directa e ingresar en el circuito económico permitirá que estas comunidades tengan mayor organización y contribuirá al desarrollo económico, cultural y social de estos territorios desde producto ancestral y artesanal.
