Para la secretaria Departamental de Salud, María Cristina Lesmes, los primeros seis meses del 2020 han sido de total aprendizaje, de enseñanzas y cambios en el estilo de vida de los vallecaucanos por cuenta de una pandemia que nadie esperaba, pero también han sido para el gobierno de Clara Luz Roldán una oportunidad para prepararse ante cualquier emergencia y contar con una red pública hospitalaria fortalecida.

 

Esto, señaló la funcionaria, sin dejar a un lado los compromisos en materia de salud contenidos en el Plan de Desarrollo ‘Valle Invencible’.

 

Fortalecimiento Red Pública Hospitalaria

 

Ante la declaratoria de la emergencia sanitaria en el país por la llegada del COVID-19, una de las prioridades del Gobierno departamental fue el fortalecimiento de la red pública hospitalaria.

 

Se destinaron recursos por $ 11.600 millones a través de resoluciones para la atención de la pandemia y adicional a esto se hizo la contratación para la compra de equipos médicos, suministros, camas y ventiladores para unidad de cuidado intensivo, así como elementos de protección de bioseguridad para el personal de salud.

 

Recordó la Secretaria de Salud, que desde el inicio de la pandemia se hizo una evaluación de la capacidad instalada y se encontró que el departamento contaba con 804 camas de unidad de cuidado intensivo entre clínicas y hospitales. Con base en ese balance se trazó el plan de ampliación y expansión de camas UCI proyectado para la época más crítica de la pandemia.

 

En un acuerdo con las IPS públicas y privadas, un 68 % de las 804 camas de UCI se asignó a la atención de los pacientes con COVID-19 que las requerían, mientras el resto se destinó para otras patologías.

 

Luego del proceso de expansión ejecutado en tres etapas y, gracias al aporte del Gobierno nacional, departamental y a las clínicas privadas, el departamento cuenta hoy con 1.636 camas UCI, de las cuales hay habilitadas 1.084.

 

“Para nosotros la pandemia ha sido una oportunidad. Abrimos unidades de cuidados intensivos en el hospital de Tuluá ‘Tomás Uribe Uribe’ y en el hospital Mario Correa Rengifo de Cali, con recursos propios, y eso para nosotros es una gran ganancia que nos deja la pandemia porque dejamos los lugares equipados”, dijo la funcionaria de salud.

 

Durante la pandemia la secretaría de salud entregó insumos de bioseguridad en los hospitales de 42 municipios del Valle del Cauca:

 

2.911 Termómetro digital

1.760 Pulsioximetros

400 Camas hospitalarias

50.000 Caretas

50 Ventiladores

212.000 Batas

422.000 Tapa bocas KN 95

3.266 Monogafas

50.000 Polainas

11.mil cajas de guantes de todas las tallas

5.000 Bolsa cadáver

20 Carros de paro

148 Monitores

 

“Hemos logrado durante el primer semestre entonces dar una respuesta oportuna a una pandemia que no estábamos esperando y cumplir esa primera meta de este programa de gobierno de la doctora Clara Luz Roldán. Hemos tenido la red pública organizada para dar respuesta y hemos logrado unos recursos adicionales muy importantes para comprar equipos y sobre todo acompañar en la protección al personal”, dijo María Cristina Lesmes.

 

De igual manera, se ha hecho un acompañamiento a las comunidades étnicas y poblaciones especiales, se ha hecho seguimiento a los hogares geriátricos y habitantes de la calle.

 

Se adelantó un estudio de seropositividad al 100 % de los empleados de las Empresas Sociales del Estado, de la Gobernación del Valle y entidades descentralizadas.

 

Autosuficiencia en pruebas COVID-19

 

Entre los logros del Gobierno departamental para dar respuesta a las necesidades que trajo la pandemia, se encuentra el fortalecimiento del Laboratorio de Salud Pública Departamental. Lo primero fue capacitar a todo el personal, aumentar el recurso humano y contar con la autorización del Instituto Nacional de Salud para procesar las pruebas de COVID-19.

 

De esta manera, el Laboratorio se hizo cargo de recibir todas las pruebas, clasificarlas, seleccionarlas y llevarlas. Además, se hizo una ‘Seroteca’ para la toma de las pruebas rápidas, se hizo una importante inversión para las adecuaciones y en poco tiempo se logró habilitar los protocolos para procesar con autosuficiencia las pruebas de COVID-19 ayudando a descongestionar este proceso en el Instituto Nacional de Salud.

 

“El Laboratorio de Salud Pública ha dado respuesta adicionando una nueva técnica de diagnóstico y dos metodologías diferentes para responder a la pandemia, pero además a todas las acciones de vigilancia y salud pública”, sostuvo María Cristina Lesmes.

 

El Laboratorio de Salud Pública permitió, además, habilitar en el Valle del Cauca 13 laboratorios, 12 en Cali y 1 en Buenaventura, generando una capacidad de procesamiento de 1.574 pruebas diarias.

 

A través del Laboratorio también se logró tener un vehículo para transportar las muestras de otros municipios y traerlas a Cali y así agilizar las pruebas.  Adicional a esto, en las próximas semanas recibirá un robot del INS para agilizar el procesamiento de pruebas COVID.

 

Señaló la Secretaria de Salud del Valle, que la habilitación de un Call Center para la atención de llamadas por COVID fue esencia durante los primeros cinco meses de la pandemia. La línea se habilitó las 24 horas del día y los ciudadanos podían reportar posibles casos de Coronavirus ante la inminente llegada del virus al país.

 

De otra parte, el Centro Regulador de Urgencias y Emergencias (CRUE) también se fortaleció. “Nosotros hemos tenido abiertos todos nuestros servicios, fortalecimos el Centro Regulador de Urgencias y Emergencias que es el organismo que ha administrado las camas de UCI y alta complejidad funcionando 24 horas al día”.

 

Con la guía de los expertos en salud del departamento

 

A instancia de la gobernadora Clara Luz Roldán el Valle del Cauca fue el primer departamento en crear el Comité de Expertos en Salud (COPESA), conformado por médicos, especialistas de clínicas y hospitales, la academia y las asociaciones médicas para aportar en estrategias, proyecciones y fortalecer la capacidad de respuesta por la pandemia.

 

De esta manera, una de las primeras recomendaciones fue ampliar la capacidad de atención y para ello el departamento solicitó en comodato las antiguas instalaciones de la clínica Saludcoop, abandonada y deteriorada.

 

Bastaron 15 días para que se habilitará la Clínica ‘Valle Solidario’, operada por el Hospital Universitario del Valle, con 347 camas, área de UCI, hospitalización de mediana y baja complejidad, laboratorios, urgencias y un quirófano. El objetivo de la clínica ha sido trasladar allí a los pacientes no COVID para concentrar en la sede principal del Hospital Universitario del Valle la atención a pacientes COVID.

 

Ayuda psicosocial en medio de la crisis

 

Los efectos en la salud mental de los vallecaucanos por cuenta del aislamiento obligatorio se reflejaron en el aumento de llamadas a la Línea 106 TeleAmigos, a través de la cual la Secretaría de Salud del Valle brinda orientación psicosocial. De 800 llamadas mensuales se pasó a 3.000 durante la pandemia, lo que obligó a ampliar el número de profesionales para la atención de quienes consultan por ansiedad, angustia y depresión.

 

“Ampliamos La línea 106, empezamos a darle cobertura a Cali, estamos negociando con Cali la retoma de la línea 106, pero durante la pandemia el departamento lo hizo, hemos apoyado a todos los municipios a través de nuestro plan de intervenciones colectivas con funcionarios adicionales para que hagan frente a las prioridades de salud pública pero también con el municipio para la respuesta a la pandemia”, aseguró Lesmes.

 

Salud pública

 

Con diferentes acciones, la Secretaría de Salud ha trabajado durante el primer semestre para el control del dengue, que a la semana 33 reportaba 24.463 casos y 46 muertes. A través de la UESVALLE, brazo operativo de esta dependencia, se han adelantado campañas de sensibilización con la comunidad y jornadas de fumigación, entrega de toldillos y manejo de criaderos del Aedes Aegypti, transmisor de enfermedades como el dengue, zika y chikungunya.

Además, durante el primer semestre la Secretaría de Salud ha hecho seguimiento a la mortalidad materna, se han atendido las patologías cerebrovasculares, enfermedades crónicas y huérfanas.

 

Se fortaleció la Defensoría del Paciente con una persona más en Buenaventura y se abrió la Defensoría en Palmira, en cumplimiento a uno de los proyectos para 2020.

 

Se ha trabajado en aspectos como el fortalecimiento del recurso humano en salud con capacitación del personal de hospitales. “Estamos organizando un diplomado para mejorar la capacidad de respuesta de los nuevos gerentes que llegaron hace tres meses en una situación tan dramática como la pandemia y al que notamos algunas falencias conceptuales y digamos que ahora que baja un poco la presión con el COVID, la Secretaría sigue con su ejercicio rutinario de asistencia técnica y acompañamiento a las direcciones locales de salud”, afirmó la Secretaria de Salud del Valle.

 

Actualmente, la secretaria está haciendo el saneamiento de las carteras con las EPS con la cooperación de la Superintendencia Nacional de Salud.

 

Metas de Salud

 

En lo que resta del año la Secretaría de Salud del Valle tiene proyectado el incremento de la cobertura de los programas de prevención y promoción, la reapertura de todos los servicios obligatorios y programados, y consolidar el apoyo a los hospitales que financieramente están mal.

 

“Vamos a empezar a trabajar en lo que queda del segundo semestre en el fortalecimiento de las finanzas de los hospitales que tienen muchas dificultades, los hospitales salen en una situación financiera muy compleja porque se perdió la producción de servicios ambulatorios y programada y tenemos una producción cercana al 30 %,y eso significará dificultades financieras. Nosotros acompañamos los hospitales, el Ministerio acompaña a los hospitales y esperamos en estos cuatro que quedan del año acelerar la prestación del servicio para recuperar las finanzas”, concluyó la funcionaria.