Las lluvias que casi a diario caen sobre Buenaventura le recuerdan a sus habitantes que tienen un problema crónico: las inundaciones. Sectores como Fundelpa, Pueblo Nuevo, La Chanflana, la Chanflanita, Mondomo, y muchos otros, ven cómo sus calles se llenan de agua hasta alcanzar niveles que dañan bienes, destruyen negocios, arruinan a propietarios y causan tragedias.

 

Para terminar de una vez por todas con este flagelo, en las Mesas Temáticas de Ambiente, y en la de Agua, Saneamiento Básico y Servicios Públicos, se vienen formulando proyectos que incluyen la intervención urgente en por lo menos quince puntos críticos de la ciudad.

 

“Para superar de raíz el problema de las inundaciones se requieren intervenciones en el plano ambiental y en el plano de infraestructura”, recalcó Emiliano Zambrano, delegado del equipo de formulación del Plan Integral Especial para el Desarrollo de Buenaventura, PIEDB, en esas mesas.

 

Buenaventura no ha tenido desde sus inicios una buena planificación urbana: sus viviendas se han construido sobre las colinas bajas, los esteros, su zona de güandales, natales y manglares, lo que ha ocasionado la invasión de quebradas, caños, cuencas hidrográficas, e incluso de áreas de baja mar. Los rellenos no tuvieron en cuenta las mareas y muchas vías se trazaron sobre áreas inundables.

 

Los proyectos que se están diseñando con la participación del Comité del Paro Cívico, del Instituto de Investigaciones del Pacífico, de la Sociedad de Aguas de Buenaventura, del Ministerio del Medioambiente, de la Oficina de Gestión del Riesgo del Distrito, también hacen gran énfasis en la necesidad de establecer una política hídrica en el Distrito. “Cada cuenca tiene características especiales y es urgente regular los volúmenes de agua, las correntías, las áreas de alta pendiente; así como también adecuar los sumideros y los caños previendo la implementación de las alternativas técnicas adecuadas para cada caso”, explicó Emiliano Zambrano. 

 

La financiación de los 32 proyectos que se están formulando para superar el problema de las inundaciones en Buenaventura hace parte de los acuerdos firmados entre el Comité del Paro Cívico del 2017 y el Gobierno Nacional.

 

El equipo de formulación del PIEDB le hizo un llamado a las Juntas de Acción Comunal, a los ediles y a las Alcaldías Menores para que se sumen a las Mesas Temáticas que están formulando los proyectos con los cuales se espera que Buenaventura, una de las zonas con mayor pluviosidad en el mundo, no vea en las lluvias una pesadilla sino un privilegio que le entrega la naturaleza.