Desde el aire, representantes del Ejército Nacional, la Alcaldía de Buenaventura, Epsa, Anla y la CVC, revisaron las condiciones actuales del río Anchicayá, pues hace unos días los habitantes de la zona denunciaron fuertes olores en sus aguas, situación que los estaba afectando.

 

Según Eduardo Velasco Abad, director de la Territorial Pacífico Este de la CVC, “se pudo notar que el río Anchicayá está muy sedimentado hasta la altura de Sabaletas, muy probablemente, porque las quebradas que vienen de la parte alta de la cuenca -sector de Las Diguas- están bajando con mucho barro y palos”.

 

Hay informes de los técnicos de la Corporación que señalan que los ríos Digua, Blanco, Danubio y la quebrada San Juan y las demás, en la parte alta, están bajando muy sedimentadas y eso llega hasta la desembocadura del río Anchicayá.

 

“Realmente, la cantidad de lluvia que está cayendo en la parte alta es muy intensa y hemos observado que hay unas partes en la montaña que están bien protegidas, y en otras ha habido derrumbes y desprendimientos. Hay árboles que se caen y aclaran el suelo, que le permite a unas especies surgir, pero todo este suelo termina siendo lavado por la lluvia cayendo a la quebrada, luego al río y, finalmente, al mar”, explicó Velasco Abad.

 

El funcionario dijo que, hasta el momento, lo que se ha evidenciado es que los altos niveles de sedimentación son por cuenta del invierno y no por causas originadas por el hombre, son sucesos naturales del bosque y la misma biodiversidad.

 

Los sobrevuelos se realizaron el sábado 11 de mayo y el lunes 13 de mayo, en avioneta y helicóptero respectivamente.