Beneficiaria del programa de gratuidad en la urbanización San Antonio, Buenaventura. Foto: Sharon Durán (MVCT).
En la urbanización San Antonio, 54 emprendedores que fueron afectados por la emergencia del COVID-19 reactivaron sus unidades de negocio con apoyo del Ministerio de Vivienda y a través de la estrategia de Acompañamiento Social, una iniciativa que lidera esta cartera y que llega a Buenaventura gracias a la alianza con la Fundación Carvajal.
Estas personas, cuyos hogares fueron beneficiados con el programa de vivienda gratuita, recibieron, cada uno, un auxilio en especie equivalente a $ 200 mil para apalancar la adquisición de insumos que permitan reactivar sus emprendimientos. Además, hacen parte de un total de 129 habitantes de San Antonio que fueron capacitados con herramientas técnicas para la administración de sus unidades de negocio.
En el marco de esta estrategia de Acompañamiento Social, también se han brindado talleres de formación enfocados en brindar capacidades y conocimientos que faciliten la vinculación laboral de los beneficiarios, como lo logró Yury Quintero, habitante de la urbanización San Antonio que participó en el curso de belleza y de gestión de ventas. “Para mí ha sido algo muy gratificante, porque he aprendido mucho y las clases me enseñaron mucho; hoy en día me encuentro laborando y le doy muchas gracias al Ministerio de Vivienda y a la Fundación Carvajal, porque todo lo que he aprendido me ha servido mucho para poder trabajar”, señaló agradecida Yury.
Como ella, más de 150 personas de esta urbanización están generando ingresos económicos para sus familias, gracias a los conocimientos adquiridos en los talleres de formación ofrecidos por la Fundación Carvajal. En total, 405 personas se graduaron en oficios como auxiliar de cocina, ventas, belleza, trabajo en alturas, construcción, entre otros. Estas acciones y logros para la comunidad son resultado del componente de Generación de Ingresos de la estrategia de Acompañamiento Social, el cual propende por el desarrollo integral de las personas y sus familias.
A partir de otro componente, denominado Desarrollo Comunitario, se han logrado articular diversas acciones de los entes territoriales. En efecto, la comunidad de la urbanización San Antonio disfruta de la pavimentación de la vía principal de su barrio, gracias al apoyo de la gobernación del Valle del Cauca. Por su parte, la alcaldía entregó dos lotes para la construcción de parques infantiles y un puesto de salud. Además, el Ministerio de Vivienda lideró una serie de talleres de liderazgo y acompañó la construcción participativa del manual de convivencia; acciones enfocadas en el fortalecimiento del tejido social de esta comunidad.
Por último, la comunidad de San Antonio, comprometida con el cuidado del medio ambiente, sembró 2.400 plantas ornamentales; además, recuperaron y embellecieron ocho sectores de la urbanización mediante mingas comunitarias lideradas por el Comité Ambiental, lo que deja una infraestructura social importante: dos parques infantiles en madera reciclable, un terreno adecuado para la instalación del parque infantil, un salón para actividades sociales y la adecuación de la escuela María Auxiliadora. Estos avances se derivan del componente de Hábitat Saludable del Acompañamiento Social, una estrategia que en Buenaventura ha contado con una inversión de $ 1.300 millones.
