Jun 29, 2024

Colombia y el mundo conmemoran 31 años de la declaración del Día Internacional de la Mujer Indígena el 5 de septiembre

  • Sep 03, 2014
  • Sep 03, 2014
  • 2280

Colombia y el mundo conmemoran 31 años de la declaración del Día Internacional de la Mujer Indígena el 5 de septiembre

 

La elección de Belkis Florentina Izquierdo Torres como la primera magistrada auxiliar indígena en Colombia; de Mama Ascensión Velasco Silva, como primera gobernadora del pueblo Misak y de Francy Hernández, como la primera mujer indígena en convertirse en oficial de la Armada Nacional, son tres importantes hitos inéditos que tienen un denominador común: exaltar el rol de liderazgo que las mujeres indígenas han asumido y potenciado durante los últimos años en sus comunidades y en el país.

 

Para celebrar estos, y otros importantes logros, establecer iniciativas que permitan la pervivencia de las comunidades e impulsar el liderazgo de las mujeres en sus pueblos, en el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer Indígena, se llevarán a cabo en Colombia una serie de actividades con el fin de conmemorar esta importante fecha; escenarios de encuentros liderados por diferentes organizaciones indígenas.

 

“Hay mujeres que han entregado la vida por los pueblos indígenas y esta es la manera de conmemorar, reconocer y agradecer los esfuerzos de muchas de ellas alrededor del mundo”, asegura Arelis Uriana, consejera del área de Mujer, Familia y Generación de la Organización Nacional Indígena de Colombia - ONIC.

 

Según la consejera Arelis, el papel de la mujer indígena ha sido fundamental porque resalta la pervivencia de los pueblos en Colombia. La mujer representa, además, armonía, tranquilidad, equilibrio y paz, porque cumple con el rol de propiciar los espacios de convivencia y tolerancia dentro de la comunidad. “Las mujeres somos quienes buscamos la forma de armonizar, conservar y resaltar el valor de la naturaleza, la familia, la cultura y nuestras costumbres”, afirma Uriana, lideresa del Pueblo Wayuu.

 

Colombia y el mundo conmemoran 31 años de la declaración del Día Internacional de la Mujer Indígena el 5 de septiembre

Belki Izquierdo

 

Para la ONIC, la conmemoración de esta fecha es muy significativa por la importancia que ha tomado el papel de la mujer en los espacios de toma de decisiones, los que en el pasado estaban asociados únicamente a los hombres.

 

Para Arelis Uriana, el cambio de mirada sobre el rol de la mujer dentro de la comunidad (que tradicionalmente se limitaba a su rol como madre) es el resultado de un trabajo de sensibilización con sus propios compañeros, líderes y autoridades, y el fomento permanente a otras mujeres para que asuman nuevos liderazgos: “El próximo viernes cinco de septiembre analizaremos casos de mujeres luchadoras que han defendido sus derechos; por ejemplo, estudiaremos el caso de Felicita Campo, del Pueblo Zenú,  quien defendió y recuperó tierras, y aunque  le quemaron su casa y la llevaron a la cárcel, nunca dejó de luchar”, concluyó Uriana.

 

Sobre el Día Internacional de la Mujer Indígena


Desde el año 1983, el día cinco de septiembre se conmemora el Día Internacional de la Mujer Indígena, con el propósito de recordar la muerte de Bartolina Sisa, una valerosa mujer del Pueblo Quechua que luchó contra la dominación y la opresión de los conquistadores españoles. Bartolina asumió un papel de liderazgo, llegando a ser la jefa del batallón indígena, demostrando gran capacidad de organización. A su vez, armó grupos de mujeres que colaboraron con la resistencia a los españoles en diferentes pueblos del Alto Perú.

 

En el año 1782, Bartolina fue brutalmente asesinada por las fuerzas realistas españolas y es por esta razón que se estableció, durante el Segundo Encuentro de Organizaciones y Movimientos Indígenas de América, llevado a cabo en Tihuanacu (Bolivia), la fecha del cinco de septiembre para conmemorar el Día Internacional de la Mujer Indígena.

 

Bartolina provenía de la línea de las Mama T’allas, mujeres autoridades a la par de los hombres que tenían incluso divinidades femeninas propias. Mujeres inteligentes, laboriosas y guerreras que eran contempladas con respeto dentro de la filosofía Aymara.