Luego de avalar la solicitud de la Fiscalía, el juez cuarto penal municipal de Buenaventura, con función de control de garantías, dictó medida de aseguramiento consistente en detención preventiva en establecimiento carcelario en contra de Víctor Manuel Ibargüen Riascos, por los delitos de secuestro extorsivo en concurso heterogéneo con desplazamiento forzado y amenazas, en concurso homogéneo y sucesivo.
Ibargüen Riascos fue capturado por servidores del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) y agentes de la Sijin de la Policía Nacional, en la calle 1 con carrera 5, barrio Centro de ese puerto vallecaucano, mediante una orden judicial. Durante la diligencia judicial le fue incautado un teléfono celular.
Los hechos que investiga el ente acusador ocurrieron en agosto de 2012, cuando el procesado supuestamente abordó en Buenaventura a una pareja a la que habría obligado a cumplir una cita en Cali (Valle del Cauca), bajo amenazas de muerte.
Las víctimas viajaron a la capital de Valle y, una vez llegaron al inmueble donde fueron convocadas, se presume que el investigado los estaba esperando en compañía de varios hombres armados señalados de pertenecer a la banda delincuencial Los Urabeños.
Durante la reunión, Ibargüen les habría hablado de un negocio de compraventa de un terreno de 43.000 metros cuadrados en el municipio de Buenaventura, del cual debía dar cuenta la mujer citada, porque su primer esposo,
quien era uno de los propietarios del predio ubicado en el barrio Granada, en 2003 al parecer le pidió un préstamo de $ 500 millones a él (el detenido), para financiar un plan de producción agrícola.
El despojo
De acuerdo con la investigación de la Fiscalía, meses después, el deudor buscó a Ibargüen Riascos para pagarle, pero este se habría negado a recibirle el dinero diciéndole que ya eran socios, y por tanto ya le correspondía el 50 por ciento del terreno.
La víctima (primer esposo de la mujer) se negó a aceptar tal proposición y le dejó los $ 500 millones al investigado en una mesa y se marchó.
Sin embargo, en 2004, tres hombres armados llegaron la casa del hombre y lo asesinaron. Posteriormente, el día de las honras fúnebres, el procesado aparentemente se presentó en el lugar y le dijo a la viuda que “debido a la deuda de su marido con él, ahora eran socios en la parte del terreno de 43.000 metros cuadrados”.
Se conoció que cuando una de las hijas de la víctima trató de interceder habría sido amenazada con ser abusada sexualmente y de muerte, por increpar al capturado.
Entretanto, en la reunión en Cali, Ibargüen Riascos le habría indicado a la afectada que él tenía una parte de la propiedad del terreno y que el pleito se estaba adelantando en la Fiscalía.
Además, le advirtieron que, si no aceptaba las condiciones fijadas del 50 por ciento del terreno para Ibargüen Riascos, no podrían salir vivos (ella y su pareja) de la casa, por lo que al parecer los mantuvieron retenidos durante 6 horas, hasta que la viuda aceptó entregar la parte del lote que la habría exigido el asegurado.
Durante la denuncia presentada en la Fiscalía, la víctima aseguró que, debido a las amenazas de muerte que recibían ella y sus hijas, tuvieron que salir del sector donde vivían. También afirmó que por varios días desconocidos realizaron seguimientos a sus tres hijas, y que a su casa llegaron varios sujetos para amenazarla.
El vigilante contratado para cuidar el predio, objeto de disputa, al parecer recibió amenazas de muerte, teniendo que oponerse al ingreso de maquinaria, contratada presuntamente por Víctor Manuel Ibargüen, para realizar mejoras.
Las evidencias recaudadas por la Fiscalía permitieron establecer que el hombre registra 40 investigaciones por los delitos de amenazas de muerte, obtención de documento público falso, fraude procesal y usurpación de tierras.
La Fiscalía General de la Nación habla con resultados.
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