Durante 2 días, la Casa de Justicia y Paz de Buenaventura descentralizó sus actividades y se desplazó a los corregimientos marítimos de Bazán La Bocana y Juanchaco, donde sus habitantes pudieron acceder a los servicios que esta entidad presta.

 

Unas 200 personas adelantaron trámites como conciliaciones, recibieron asistencia jurídica, orientación psicológica; además de asesoría en violencia intrafamiliar y de género, asuntos de familia, resolución de conflictos, problemas de convivencia ciudadana y comunitaria, infracciones al Código de Convivencia Ciudadana y acciones de tutela, entre otros.

 

“Esta jornada descentralizada es una de las líneas estratégicas del Programa Nacional de Casas de Justicia. Nos desplazamos a estas comunidades entendiendo que hay unas barreras que le impiden a algunas poblaciones acceder a los servicios que ofertamos”, dijo Magda Lorena Zúñiga, coordinadora de la Casa de Justicia.

 

Julieth Victoria, coordinadora del programa de Juventudes de la Secretaría de Convivencia para la Sociedad Civil participó en la jornada y les habló a los habitantes de los programas de Prosperidad Social, como son Adulto Mayor, Renta ciudadana y Renta Joven.

 

“Para la juventud, que ha venido reclamando espacios de liderazgo y oportunidades para mejorar su proyecto de vida para esta población de la zona rural, que ha estado excluida de los procesos organizativos”, indicó.

 

“Uno se siente bien porque la situación económica nos impide en muchos casos llegar hasta Buenaventura para ir a la Casa de Justicia y el hecho que traigan los servicios al territorio es un gran beneficio para nosotros”, expresó Elizabeth Caicedo, una de las beneficiarias con la actividad, quien le pidió a la Mandataria Distrital, que organice cada dos o tres meses jornadas descentralizadas como estas.

 

En la actividad participaron las secretarías de Convivencia y de Salud con sus diferentes programas, Sisben y la Oficina de Prevención y Atención de Desastres.